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Comer caca rejuvenece (al menos en algunos pececillos)

El papel de la microbiota intestinal sobre el envejecimiento

Una microbiota saludable se caracteriza por ser muy diversa
taxonómicamente, con muchos grupos distintos de microbios. Diversidad es sinónimo
de salud
. Sabemos que con la edad la microbiota intestinal cambia, se reduce la
diversidad microbiana, disminuyen algunos grupos bacterianos, y aumentan los
potenciales patógenos. Y eso se suele asociar con una aumento de procesos
inflamatorios.

Una pregunta que nos podríamos hacer es si restituir la
microbiota de un anciano por una microbiota “joven” puede tener algún efecto
beneficioso, o incluso si podría mejorar las expectativas de vida. Dicho de
otro modo, ¿la restauración de la microbiota adulta por una “joven” puede hacer
que vivamos mejor o incluso más tiempo?
, ¿un cambio de microbiota puede
alargarnos la vida?

Estudiar esto en humanos puede ser … complicado. Así que un
grupo de científicos se han propuesto investigarlo en animales de vida corta,
animales que de normal vivan muy poco tiempo. Para ello, han empleado como
modelo el pez killi turquesa (Nothobranchius furzeri), un tipo de carpa pequeñita de agua dulce que vive en charcas y
estanques y que se puede cultivar en los acuarios. Estos pececillos tiene una
vida media muy corta, solo viven unos pocos meses en cautividad, y por eso se
han empleado para investigar el envejecimiento.

Figura 1. (A) Dos ejemplares representativos de peces killi
de seis y dieciséis semanas de edad, jóvenes y adultos respectivamente. (B) La
diversidad de la microbiota intestinal es mayor en los jóvenes que en los
adultos. (Fuente: referencia 1)

Lo primero han comprobado que estos peces tienen una
microbiota intestinal muy compleja, con los mismos grupos de bacterias que
nosotros, aunque en distinta proporción. Además, al igual que nos ocurre a los
humanos, la diversidad y complejidad de su microbiota disminuye conforme los
pececillos se van haciendo mayores
: no cambian la cantidad de bacterias pero si
la diversidad o “riqueza” bacteriana. Por ejemplo, mientras que el intestino de
los jóvenes es más rico en los grupos Bacteroidetes, Firmicutes y
Actinobacteria, en los viejos predominan las Proteobacterias.

La microbiota intestinal regula la esperanza de vida de los peces killi

Lo que los investigadores han hecho es alimentar peces
adultos con el contenido intestinal (caca) de peces jóvenes (más o menos un
intestino joven daba para alimentar a dos adultos). Previamente habían tratado
a los adultos con un cóctel de antibióticos para reducir su microbiota y
favorecer la colonización de las bacterias del intestino de los jóvenes. Se
trata de recolonizar el intestino de los peces adultos con bacterias de
donantes jóvenes
.

Figura 2. Esquema del experimento de transferencia de la microbiota intestinal. Los
peces tenía nueve semana y media. Ymt: pez que recibe la microbiota de un
ejemplar joven (de seis semanas) después de un tratamiento con antibióticos.
Omt: pez que recibe la microbiota de un ejemplar de la misma edad (nueve semana
y media) después de un tratamiento con antibióticos. Abx: pez que recibe solo tratamiento
con antibióticos, sin microbiota adicional. Cóctel de antibióticos: vancomicina,
metronidazol, nemocinina y ampicilina.
(Fuente: referencia 1).

Los resultados han sido sorprendentes. Este trasplante de
microbiota ha aumentado de forma significativa la esperanza de vida de los
peces adultos
: si un adulto sin tratamiento no suele vivir mucho más de 20
semanas, con la microbiota “joven” podían llegar casi hasta las 30. Además, en
los peces trasplantados se retrasaban algunos comportamiento típicos de la edad
adulta y seguían siendo más activos. El “trasplante” previno la disminución de
la diversidad microbiana propia de la vejez y se mantuvo una comunidad bacteriana
“joven” de forma duradera.
Esta microbiota “joven” se asoció al mantenimiento
de un sistema inmune saludable, con efectos anti inflamatorios sobre el
pececillo. En definitiva, el trasplante de microbiota “joven” fue estable y
alargó la vida de los peces en condiciones saludable
.

Figura 3. Análisis de la supervivencia. Solo los peces que habían recibido la microbiota de un
ejemplar joven (Ymt)
sobreviven hasta las 30 semanas. El resto no suelen
vivir mucho más de 20 semanas. (Fuente: referencia 1).

En humanos el trasplante fecal se ha empleado para tratar infecciones recurrentes por Clostridium difficile, pero de momento
es todavía muy pronto para aventurar si este procedimiento puede alargar
nuestra esperanza de vida. Confiemos que este artículo no lo lean los
fabricante de esas cremas antiedad milagrosas rejuvenecedoras que regeneran las
células a base de oro y caviar, ADN de semillas o baba de caracol, no vaya a
ser que a partir de ahora les añadan … caca de pez. A partir de ahora, fíjate
bien en la etiqueta de tu crema antiarrugas.

(1) Regulation of life span by the gut microbiota in the short-lived african turquoise killifish. Smith, P., y col (2017). eLife: 6:e27014. DOI: 10.7554/eLife.27014

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