En los últimos años, la investigación sobre la composición de la microbiota humana (el conjunto de microorganismos que llevamos en nuestro cuerpo) es objeto de gran interés. La caracterización de estos microorganismos mediante herramientas genómicas y el estudio de su interacción con nuestro organismo pueden proporcionar información muy valiosa sobre su papel en la salud y enfermedad humana.
Hasta ahora todos los estudios se habían centrado en la identificación de bacterias, pero recientemente se ha publicado en la revista Nature el primer estudio sobre metagenómica viral del tracto intestinal humano: la secuenciación de los genomas virales aislados de muestras fecales de cuatro parejas de gemelos idénticos y sus respectivas madres, que no habían tomado antibióticos en los seis meses previos al estudio. Las muestras se tomaron en tres ocasiones a lo largo de un periodo de un año, y los resultados se compararon con la composición bacteriana de las mismas muestras.
El estudio confirmó que la composición de la microbiota bacteriana en las muestras fecales era muy similar entre gemelos y sus respectivas madres, a diferencia de lo que ocurría entre individuos no relacionados. Por el contrario, la población de virus fue única para cada persona. Además, hubo muy poca variación en la composición de la población de virus de un mismo individuo a lo largo del año que duró el estudio, dominando un tipo concreto de virus con una gran estabilidad genética. En resumen, la composición viral del intestino es algo muy personal y estable, con poca dependencia de factores genéticos, al contrario de lo que sucede con la población de bacterias intestinales.