Al filo de lo imposible: microbios que sobreviven dentro de las rocas del desierto

Cerca del 20% de
la superficie de la Tierra se consideran zonas áridas. Algunos desiertos se
clasifican como zonas híper-áridas: el desierto de Atacama en Chile, es el más
árido del planeta, donde se han registrado periodos de hasta cuatro años sin
lluvias y fluctuaciones diarias de temperatura entre -25 y 30 ºC; en el
desierto de
Néguev en Israel se puede alcanzar los 50 ºC; y en el valle seco de McMurdo  en la Antártida, con vientos de hasta 320
km/h, la evaporación evita todo tipo de humedad por lo que no hay nieve ni cubierta
de hielo.

Algunas de las zonas
más inhóspitas del planeta nos recuerdan las imágenes de la superficie de Marte
que envía el Curiosity. En la
fotografía el
desierto
de
Néguev
(Israel), donde según la tradición bíblica
Abraham, Isaac y Jakob cuidaban sus rebaños.

La falta de agua
del desierto no es la única condición desfavorable para la vida. En estas zonas
desérticas además de la aridez, los seres vivos deben defenderse de la luz
solar, de la intensidad de la luz ultravioleta, de las altas y bajas
temperaturas y de sus rápidas fluctuaciones, de los altos índices de
evaporación, de los largos periodos de desecación y, frecuentemente, de los
altos niveles de salinidad. Vamos, que sobrevivir en estos desiertos no es nada
fácil. 

A pesar de ello,
los investigadores han sido capaces de detectar la presencia de microorganismos
que han desarrollado estrategias para colonizar las zonas más inhóspitas del
planeta. En estas condiciones, algunos microorganismos han encontrado micro
hábitats que les permiten sobrevivir, como los poros o fisuras microscópicas que se encuentran en el interior de las
rocas del desierto
. Los investigadores han aislado microorganismos no solo
de la superficie de las rocas o del espacio entre éstas y el suelo propiamente
dicho, sino incluso del interior de las rocas. Hay por tanto microbios que se refugian dentro de las
rocas
. Esos hábitats les pueden proporcionar la suficiente humedad para
poder vivir, les protege de la radiación UV letal, del viento y de los cambios
de temperatura y, en muchos casos permite el suficiente paso de luz como para
realizar la fotosíntesis. Se han aislado cianobacterias
 fotosintéticas, como los géneros Chroococcidiopsis y Gloeocapsa, bacterias no
fotosintéticas
, arqueas, y asociaciones de algas y hongos, como
los líquenes. Aunque el agua es esencial para la vida, una muy pequeña cantidad
puede ser suficiente para la supervivencia de algunos microorganismos, que pueden
obtener vapor de agua de condensación dentro de los espacios que dejan los poros
en el interior de las rocas.

En la imagen de la
izquierda se muestra un corte de una roca volcánica del desierto de Atacama en
la que se puede ver una capa de color verde en su interior (flecha), que
corresponde con microorganismos fotosintéticos. En la derecha se muestra una
imagen de microscopia electrónica de barrido de un poro de una de estas rocas:
las estructuras grumosas son microorganismos.

Estos ecosistemas extremadamente
áridos son un excelente laboratorio para investigar los límites de la vida en
nuestro planeta y las estrategias que emplean los microorganismos para
adaptarse a estas condiciones. Además, estos estudios pueden darnos información
sobre la historia de la vida no sólo en la Tierra si no también en otros lugares
de nuestro sistema solar, como Marte.
 

Microorganisms in desert rocks: the edge of life on
Earth. Wierzchos, J., et al. International Microbiology (2012) 15:173-183 doi: 10.2436/20.1501.01.170
 

http://www.im.microbios.org/1504/03_Wierzchos.pdf 

9 Comments

  1. La vida en ambientes tan extremos es fascinante y lo mas interesante son los mecanismos que utilizan los microorganismos para poder sobrevivir: desde la modificación de su estructura externa asta las pequeñas alteraciones de su propio ADN para poderse adaptar a las condiciones climáticas extremas de su entorno. mas que una peculiaridad de la vida son condiciones que sobrepasan los limites de vida de la mayoría de los seres vivos incluyéndonos nosotros los seres humanos.

  2. Un par de preguntas:
    ¿Hasta que punto se puede afirmar que la vida en la tierra procede de microorganismos llegados del exterior de ésta?
    ¿Qué líneas de investigación existen al respecto?
    Muchas gracias.
    Un saludo.

    • Xesús,
      no se sabe. La hipótesis de que la vida en la Tierra pudo provenir del exterior es solo una hipótesis. Se están buscando moléculas orgánicas complejas, como nucleótidos, por ejemplo, en el espacio exterior (en el cometa Roseta, por ejemplo). Si existen, quizá podrían haber llegado hace millones de años a la Tierra y haber contribuido a la formación del primer ancestro celular. Pero solo son hipótesis de trabajo.
      Gracias,
      Ignacio

  3. Que fantástico es el mundo de la microbilogia es una de las ciencias que siempre han llamado mi atención y con lo que he aprendido por medio de este curso me sorprendo aun mas.

  4. Cuan maravillosa es la forma como los microorganismos poseen la capacidad para modificar su estructura genética a fin de lograr permanecer vivos en ambientes extremos.

Responder a Ignacio López-Goñi Cancelar la respuesta

Your email address will not be published.

Anterior

Bye-bye PCR: el chip “prodigioso” que detecta bacterias en 30 minutos

Siguiente

Pa-ta-ta: foto al provirus VIH dentro de una célula individual